miércoles, 12 de mayo de 2010

Magia



















La niña llegó corriendo por el pasillo y se colocó entre las rodillas de su padre.
-¡Papá, papá, papá! – gritó con los ojos brillantes
-Eh eh, ¿qué te pasa cariño? ¿Dónde está el fuego? – le dijo su padre bajando el periódico que estaba leyendo.
-Papá, ¿existe la magia?
-¿La magia? ¿Y eso a qué viene ah…?-aguzando el oído, creyó escuchar en la televisión de la habitación de al lado las palabras: “Y en su siguiente truco, el inimitable Copperfield...”. Miró hacia la niña, que tenía clavada en él una mirada que no admitía demora.
Con una dulce sonrisa, la cogió por debajo de los brazos y la acomodó sobre sus rodillas.
-Cielo, ¿qué crees tú que es la magia?
-Eem… ¡Sacar conejos de un sombrero! – dijo muy convencida, provocando las risas de su padre.
-¿Tú crees, nada más que eso? – La niña lo miró con curiosidad–. Cielo, la verdadera magia, es una habilidad. Es la habilidad de hacer que la gente crea en lo imposible.
La expresión de la pequeña denotaba que no estaba satisfecha con la respuesta.
-Pero entonces… ¿existe o no? – volvió a preguntar, reiterando su impaciencia con unos golpecitos en el pecho de su padre. Él le acarició la cabeza con ternura.
-¿Sabes qué? Eso depende solamente de ti – le contestó, acompañando sus palabras con un guiño y un toquecito en la nariz de la niña-. Si crees que existe la magia, ella solita se hará real.
Sus palabras hicieron que los ojos de la niña se abrieran como platos, y que de un salto se bajase de las rodillas de su padre.
-¡Entonces siempre creeré en la magia, papi! – exclamó con entusiasmo, dándole a su padre un beso en la mejilla. Acto seguido, salió corriendo por la puerta, como si el conejo de la chistera mágica la esperara en el jardín. Él siguió su carrera con una sonrisa enternecida.
-¿Qué miras con esa cara de bobo?- le interrogó una voz cantarina, sacándolo de su ensimismamiento. Su esposa.
-¿Sabes, cariño? Toda la vida llevo queriendo ser un ilusionista de los de la tele… y resulta que mi ilusión más mágica estaba en esta casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario